PEKÍN. Casi dos mil 300 delegados del Partido Comunista de China (PCC) se reúnen hoy en Pekín para un Congreso Nacional que debería conducir a la reelección del mandatario Xi Jinping para un tercer mandato.
Salvo gran sorpresa en esta semana de cónclave, el dirigente será ratificado como secretario general del partido, preludio de su reelección como presidente el próximo año, lo que lo consolidará como el líder más poderoso desde Mao Zedong.
“Este encuentro será el evento político más relevante de China en décadas” y marcará el rumbo del país en los próximos 10 años o más, dijo la firma de consultoría Trivium China, convencida de que Xi obtendrá un nuevo mandato por cinco años.
Una de las cuestiones clave de la reunión girará alrededor de mantener o no la restrictiva estrategia de Covid Cero para combatir la pandemia del coronavirus.
Esta política reforzó el control social sobre los ciudadanos, con cada uno de sus movimientos registrado digitalmente, en un país ya criticado por vulneraciones de los derechos humanos.
A pesar de las inconveniencias y el daño económico causado, los medios estatales defendieron que “aflojar” ante el virus sería “irresponsable”.
El cuasi aislamiento que China se impone respecto al resto del mundo y los repetidos confinamientos ahogaron el crecimiento, que puede ser el más débil en cuatro décadas, exceptuando 2020 cuando la economía global se hundió por la pandemia.
Esta semana, la máquina de censura digital de China retiró virtualmente todas las referencias a una inusual protesta en Pekín con pancartas denunciando al presidente Xi y su política sanitaria.
Videos y fotografías compartidas en redes sociales el jueves parecían mostrar a un manifestante colocando dos pancartas pintadas a mano con frases críticas contra el poder en un puente de la capital.
Una atacaba virulentamente la política sanitaria del país y la otra incitaba a los ciudadanos a manifestarse y a derrocar al “dictador traidor Xi Jinping”.
CARRERA ARMAMENTÍSTICA
Otro de los temas que se abordará es la actual carrera armamentística que se está desarrollando en Asia-Pacífico. Durante una década de poder de Xi Jinping, China construyó la mayor flota militar del mundo, modernizó el ejército más numeroso del mundo y amasó un arsenal balístico y nuclear capaz de poner en apuros a cualquier enemigo.
Y los próximos años de mandatos del presidente chino probablemente presencien una acelerada carrera armamentística ante la intención de sus vecinos de seguir el ritmo de Pekín.
De norte a sur, la compra de armamento se ha disparado en la región: Corea del Sur ha desarrollado una flota de alta mar y Australia ha adquirido submarinos de propulsión nuclear.
Según los datos del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos en Londres, el gasto en defensa en Asia-Pacífico únicamente el último año superó el billón de dólares. China, Filipinas y Vietnam duplicaron su gasto militar en la última década. Corea del Sur, India y Pakistán no se quedaron lejos. Incluso Japón, dotado con una Constitución pacifista, propone presupuestos récord de defensa.
➡️ Suscríbete a nuestro Newsletter y recibe las notas más relevantes en tu correo
Xi realizará un análisis de su último mandato, pero también ofrecerá una hoja de ruta sobre los próximos cinco años. Se espera un discurso largo: en 2017 habló durante tres horas y media.
El portavoz del congreso, Sun Yeli, dijo en una rueda de prensa que el evento terminará el 22 de octubre, con lo que la elección de Xi y el resto de la cúpula del partido debería desvelarse el día después.