El presupuesto de este año de la entidad mexiquense plantea la propuesta de aumentar las cuotas a las personas derechohabientes del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMYM).
De acuerdo con ese documento, para el 2023 hay varios riesgos que podrían afectar las finanzas estatales, entre ellas, que las contribuciones sean insuficientes para cubrir las necesidades del ISSEMYM y que las instituciones no cumplan con el pago de cuotas y aportaciones.
En un listado de riesgos nacionales para las finanzas públicas de este año se mencionan factores como: la inflación, las tasas de interés, el precio del petróleo, la guerra, mientras en el ámbito estatal destaca la falta de recursos en el ISSEMYM.
“Que el importe de las contribuciones no sea suficiente para cubrir las necesidades financieras del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios y que las instituciones públicas aportantes no cumplan en tiempo y forma con la obligación del pago de contribuciones y retenciones de seguridad social a las que están obligadas”.
La propuesta de solución que se señala es realizar una reforma legal y aumentar cuotas y aportaciones a derechohabientes y a instituciones:
Una reforma a la Ley del Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios para incrementar las cuotas y aportaciones de seguridad social.
En 2018, la anterior Legislatura de mayoría priísta, antes de irse, aprobó una nueva ley con un sistema de Afores que sustituía al sistema solidario, pero al llegar los anteriores diputados, con mayoría de Morena, abrogaron esa norma, y hasta al momento, al pleno no se ha presentado ninguna nueva iniciativa de ley.
Desde el 2020 la Secretaría de Finanzas estatal, de acuerdo con legisladores, propuso un aumento del 3% a las cuotas de los trabajadores y del 7% a las aportaciones de las instituciones, que fue rechazada por los trabajadores y por los diputados.
Hace unos días legisladores locales se reunieron con el director del ISSEMYM, José Arturo Lozano Enríquez, quien destacó que el pago de pensiones es una de las principales cargas y ese modelo no hay institución que lo soporte.
Los representantes populares advirtieron la necesidad de impulsar un nuevo marco legal para la institución, en mejorar su recaudación, eficientar su gasto e implementar un modelo preventivo de salud que evite mayores gastos por la atención de enfermedades crónico degenerativas.
El director del ISSEMYM refirió que ese instituto atiende a 840 mil derechohabientes sin contar a sus familiares y dependientes económicos, cuenta con una plantilla laboral de casi 380 mil servidores entre operativos, administrativos y personal médico y de enfermería y un promedio anual de 700 residentes.
También dijo que operan 115 unidades médicas entre hospitales regionales, de alta especialidad y clínicas, que cada día atienden a 46 mil personas y dos nacimientos cada hora, que en conjunto implican un gasto de 100 millones de pesos diarios.
Además, señaló que hay retos como: atender una población creciente de adultos mayores con enfermedades crónico degenerativas y el hecho de que solo hay cinco trabajadores activos por cada pensionado y unas 60 mil personas servidoras públicas solicitarán su jubilación en los próximos años.