Causas como la orfandad (en especial por la situación de la pandemia por Covid-19) y de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), en nuestro país hay más de 774 mil 800 menores de cinco años que están al cuidado de sus hermanos de menos de 10 años.
De ellos en las estadísticas, nuestra entidad concentra al mayor número de niños que se encuentran en esa condición siendo 149 mil 100, cuya responsabilidad descansa en también menores de edad.
Cabe señalar que la asociación Tejiendo Redes, Infancia en América Latina y el Caribe, en sus datos ha reflejado que de estos 774 mil 800, hay 315 que se encuentra en una condición de orfandad; mientras que los otros están al cuidado de los hermanos mayores por que sus papás salen a trabajar.
Esta organización puntualiza que las políticas que ha aplicado la administración federal al quitar las Estancias Infantiles, Escuelas de Tiempo Completo y Escuelas de Jornada Extendida, que habían sido una red de protección para niños y niñas; han dado como resultado el deterioro del desarrollo de los menores de edad y las problemáticas que viven las familias al no contar con lugares donde dejar a sus menores mientras que ellos tienen que trabajar para llevar el sustento a sus hogares.
Por otra parte, en México celebramos el 30 de abril el Día del Niño, pero habría que concientizarnos que no todos los niños celebran este día entre risas, regalos y festejos; ya que también el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en sus estadísticas informa que más de 350 mil niños del Estado de México trabajan para sustentarse y apoyar a sus familias.
Mientras que en México son más de 800 mil niños y niñas de entre 5 y 17 años de edad que trabajan jornadas de 35 y más horas a la semana; y la mitad ni siquiera acuden a las escuelas.
Pese a que el trabajo infantil está tipificado en la Ley Federal del Trabajo, donde la edad mínima de acceso al trabajo es de 14 a 15 años; y cuyo acuerdo fue reformado y entró en vigor con el acuerdo 138 que México suscribió con la Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Así por un lado tenemos a miles de pequeños con responsabilidades de adultos cuidando a sus menores con riesgo de sufrir accidentes, cuidados inadecuados, sin hablar de que pueden violentarse entre ellos. Y por otra parte realizando trabajos que no les corresponde por su edad para ayudar a sus familias.
Sin duda urgen políticas públicas que ayuden a subsanar este tipo de problemáticas que pueden generar a la larga adultos con problemas psicológicos, emocionales y que les convierta en personas agresivas o desubicadas. Se debe buscar que tengan un entorno que les eleve la autoestima, nivel académico y emocional, para que en el futuro sean capaces de salir adelante como seres humanos productivos y felices.