El reporte compartido por el INEGI sobre el comportamiento de la inflación durante febrero, representó una mejoría respecto a lo que analistas financieros pronosticaron para el segundo mes de 2023 de 7.67 por ciento.
El INEGI dio a conocer que la inflación se desaceleró durante febrero y se ubicó en 7.62 por ciento, en comparación con el 7.91 por ciento registrado en enero. Pese a ello, la inflación acumula 24 meses fuera del rango objetivo del Banco de México de 3 por ciento +/- un punto porcentual.
Pese a las medidas y las políticas establecidas por el banco central ha sido prácticamente imposible cumplir con las expectativas de control o reducción de la inflación en el mercado. Por lo que hoy, llama la atención el llamado que desde el ejecutivo federal se realizó para ejecutar un nuevo plan comercial con países de América Latina para combatirla inflación.
Esta medida dista de ser positiva para la economía de las y los mexicanos o de tener un impacto tangible en el tema inflacionario dado que la mayor cantidad de productos que se importan provienen de regiones como Asia, Europa y Norteamérica; en otras palabras, ningún país ubicado al sur de nuestra frontera se ubica siquiera dentro de los principales 4 socios comerciales que México tiene en el exterior.
Desde el sector económico mexiquense no consideramos que la cancelación o disminución de aranceles para productos provenientes de Centro y Sudamérica sea una medida que favorezca el control y reducción de la inflación en el país. Esto, debido a que los productos enviados desde las naciones del cono sur. no son base para la proveeduría de la industria mexicana y, por ende, no constituye un pilar para la generación de bienes dentro del país.
Ante esto, se requiere analizar la inflación desde varias aristas. El primer paso es consolidar la proveeduría local; asimismo, es fundamental garantizar la seguridad en el traslado y logística de las mercancías para evitar el encarecimiento de los bienes; como tercer punto, se requiere el desarrollo de infraestructura para facilitar y abaratar los traslados; y finalmente, se debe señalar que el consumo aumentó considerablemente tras las restricciones por la pandemia de Covid-19.
Si bien los tratados comerciales son importantes, es prioritario fortalecer o incluso ampliar los ya existentes con Estados Unidos, Canadá, naciones de la Unión Europea y del continente asiático; países que ya forman parte de nuestra cadena productiva.
Concretar mayores acuerdos con estas naciones junto con medidas que fomenten el desarrollo de la industria nacional, permitirá reducir paulatinamente la subida constante que ha mostrado la inflación en el país. Fortalecer la economía local, es fortalecer el bolsillo de las familias mexicanas.
Lic. Gilberto Javier Sauza Martínez / Consejero Presidente de CONCAEM
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