Desde su creación, la Charrería, conocida como el deporte nacional, ha evolucionado y se ha adaptando a los nuevos tiempos, por lo que hoy, sus mejores exponentes tienen la misma preparación que un deportista de alto rendimiento.
Asimismo es más que un deporte, porque ademas de la exigencia física y mental para su práctica, en cada encuentro siguen prevaleciendo los valores de hermandad y la convivencia familiar.
El 14 de septiembre se celebra el Día de la Charrería y en el marco de este festejo Omar López, presidente de la Asociación de Charrería del Estado de México refirió que la evolución ha sido notable, sin embargo, se siguen conservando las bases con las que fue creada en los llanos de Apan, Hidalgo.
“No era deporte, era una afición campirana que empezó con la tradición más antigua que es la terna, terneaban para marcar el ganado, después entre las grandes haciendas de ese entonces empezaron a competir y ahí nace la charrería como la conocemos”, recordó López.
El también charro refirió que hoy las cosas son muy diferentes, siendo un deporte profesionalizado, “ya existen charros profesionales de alto nivel, hay que prepararse como cualquier deporte de alto rendimiento, hay que tener los mejores caballos; los charros como atletas deben hacen ejercicio, llevar cierta alimentación, prepararse mentalmente para llegar a las grandes competencias”.
En este sentido añadió, “el nivel más alto son las competencias triple A, donde se ven a los grandes charros, con un nivel de manejo caballar y vacuno muy alto, aunque la idea es seguir inculcándole a las nuevas generaciones que practiquen este deporte, que agarran una soga y para eso tenemos la escuela de Charrería en la asociación estatal”.
Con la pandemia por Covid -19, la Charrería al igual que casi todas las actividades cotidianas cambiaron, sin embargo, los eventos se han retomando con la conciencia de mantener el protocolo de sanidad, de acuerdo a lo dicho por el dirigente, “la pandemia nos dejó en stand by pero ya lo estamos retomando, vienen las nuevas generaciones conociendo, sobretodo los niños; tenemos un dicho que dice que donde veamos un niño con una soga, la charrería tienen futuro”.
Para Omar, lo importante este día y en lo sucesivo es conservar el deporte nacional con las mismas bases y exigencia que cualquier disciplina en la vida, “es un deporte de hermandad, aquí decimos que tenemos hermanos de sangre y hermanos charros, es de mucho compañerismo, apoyo, es un ambiente muy familiar. A cualquier mexicano se le identifica como un charro en el mundo, lo que les digo es que conozcan, que es un deporte de mucha disciplina, constancia y nosotros queremos seguir impulsando estas tradiciones para que mañana sigamos teniendo grandes charros”.
