Un nuevo estudio aparecido esta semana, reafirma que en México persiste un atraso en cuando a la inclusión de las mujeres en el ámbito laboral.
El documento, dado a conocer esta semana por el Instituto Mexicano para La Competitividad (IMCO, destaca la necesidad de que las empresas lleven a cabo mejores prácticas de inclusión de mujeres en las empresas y resalta que las compañías privadas son actores clave en el desarrollo y crecimiento económico de México.
Subraya que las empresas “generan 71 por ciento de los empleos y captan 69 por ciento del talento femenino que tiene un trabajo subordinado del país, además de que de las 416 mil mujeres a nivel nacional en puestos de mayor jerarquía, 84 por ciento colaboran en pequeñas, medianas y grandes empresas”.
El IMCO afirma que, si bien, no hay suficiente información púbica para medir la representación de mujeres por nivel de puesto ni las políticas de inclusión que ofrecen las empresas, “se han hecho algunos esfuerzos para medir esta situación”.
Uno de ellos es el estudio Mujeres en las empresas: Impulsoras del cambio, que realizó en alianza con el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE) Business School y que se dio a conocer el pasado martes.
En la publicación de este organismo, como se explica, “se analizó a un grupo de 182 empresas del mercado de capitales y deuda, listadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y la Bolsa Institucional de Valores (BIVA) utilizando la información pública contenida en los reportes anuales, que por normatividad las emisoras deben presentar ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), así como la información publicada en los reportes de sustentabilidad, en ambos casos para 2021”.
Resalta la fuente que la representación de las mujeres en México disminuye conforme aumenta el nivel jerárquico, pues en estas empresas “alcanzan una participación de 36 por ciento, pero se reduce a 21 por ciento en direcciones de áreas jurídicas, 10 por ciento en direcciones de finanzas y a 4 por ciento en la dirección general.
Asimismo, hay una mujer por cada 10 integrantes en los consejos de administración, “lo que posiciona a México como el cuarto país entre los miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), con menor presencia de mujeres en estos órganos de gobierno corporativo”.
El (IMCO) y la Fundación Konrad Adenauer Stiftung (KAS), entrevistaron a directivos de las áreas de recursos humanos, desarrollo institucional, o diversidad e inclusión pertenecientes a 13 empresas y una conversación con 17 mujeres principalmente en puestos de mando medio, el cual arrojó, señaló el Instituto “que las políticas de inclusión con perspectiva de género efectivas generan condiciones laborales más equitativas para que las mujeres lleguen a puestos de toma decisiones”.
Además, “a las empresas les conviene avanzar hacia políticas de inclusión de género efectivas que se reflejen en una mayor representación de mujeres en puestos de mando, pues las empresas con más mujeres en puestos de toma de decisiones se asocian con beneficios como una mayor innovación, a través del desarrollo de nuevos productos que generan mayores ventas, un mejor desempeño financiero, mejores ambientes laborales con menos favoritismo y mayor colaboración y mayor contratación de mujeres.
Al tema de inclusión laboral se suma también la brecha salarial que aún persiste en algunos sectores en nuestro país. En resumen, aunque se ha avanzado en forma muy importante queda un buen trecho por recorrer para tener un “piso parejo” para las mujeres, que siguen representando más del 50 por ciento de la población mexicana.
Para ello se requiere el compromiso de las empresas privadas de cualquier tamaño, que son, con mucho, las principales empleadoras en el país.
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